Hacer realidad una escuela infantil concebida como un lugar en el que conviven niños y niñas, adultos y familias, como un espacio donde aprender a vivir y convivir placenteramente, exige del equipo de escuela una planificación intencional sobre qué condiciones de vida, qué ambiente educativo, qué marco de convivencia vamos a propiciar; en suma, qué propuesta de vida cotidiana queremos poner en marcha. Dicha propuesta ha de ser un proyecto conocido y compartido con las familias: qué se pretende en cada momento o situación, con qué criterios ordenamos y priorizamos los diversos mome…